“El adviento es un tiempo atractivo, cargado de contenido, evocador, válido… Vivir el adviento cristiano es revivir poco a poco aquella gran esperanza de los grandes pobres de Israel… La vida es todo adviento o hemos perdido la capacidad de que algo nos sorprenda grata y definitivamente… La esperanza es la virtud del adviento. Y la esperanza es el arte de caminar gritando nuestros deseos”. (Vicent Ryan)
PRIMER DOMINGO: Estad atentos ... viene el Señor
Miramos al Oeste, por donde se pone el sol. Llega la oscuridad y la noche.
La Palabra nos dice que estemos en vela, atentos a la luz que llegará. No nos durmamos, permanezcamos a la espera en oración.
¡Velad y orad!
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SEGUNDO DOMINGO: Preparad el camino
Miramos al Sur, a los pobres, a los que están abajo, a los que sufren el dolor de la injusticia. Cuántos caminos rotos, cuántos baches, cuánto que reparar.
Pongámonos manos a la obra. Comprometámonos. ¡Sirvamos!
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TERCER DOMINGO: Alegraos en la espera
Miramos al Este por donde saldrá el sol. Esperamos alegres porque está ya muy cerca, empieza a clarear. Vivamos con alegre esperanza
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CUARTO DOMINGO: El Señor está contigo
Miramos al Norte, hacia lo alto. Si encontramos el norte ya no estamos perdidos, sabremos cómo y hacia donde caminar. Jesús no habita, nace en nosotros, está contigo, en cada uno de nosotros. El Señor viene a nacer en ti.
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